El presidente de México abrió un debate histórico, que se había pospuestos por siglos, entre la conquistadora y la colonizadora España y el dominio de la Iglesia Católica, que han permanecido en silencio ante el exterminio y esclavitud de los indios de américa y el saqueo de las riquezas de ahora nuestro país.
A los españoles no les gustó que le digan sus verdades históricas, en el sentido de que los españoles que estuvieron en los territorios americanos se saquearon fabulosas cantidades de oro y plata, que en aquél entonces, que sustentó la hegemonía de la dinastía de Habsburgo en Europa y ayudó a la creación de una economía global.
Las crónicas históricas establecen cómo la riqueza minera de Zacatecas, Sinaloa, Jalisco, Guanajuato, y otras entidades fueron el gran sustento de la riqueza que impulso a España y ayudó a construir la infraestructura de la Iglesia Católica. Esta riqueza que estaba manchada de sangre por el despiadado trato que los españoles les dieron a los indígenas, por el exterminio de grandes grupos indígenas, hechos que marcaron nuestra historia y que ellos siguen cerrando los ojos para no verlos.
La historia registra como la plata del cerro de Potosí, con la que los españoles pagaban el marfil que traían de la India, los productos de Arabia, entre otros los perfumes que usaban sus mujeres, como las telas o la seda que usaban.
La grandeza de la Iglesia, está construida en medio de la sangre, la explotación y el despojo violento de miles de seres humanos en América, que ahora se niegan a reconocer. Cuando menos reconocer.
En su crónica extraordinaria de Hans-Jürgen Prien explica como en nombre de Dios y de la Corona llegó Cristóbal Colón y Hernán Cortés, en esa unidad inseparable que sólo fue cuestionada por Martín Lutero.
A 500 años de distancia, la petición formal del presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador, tanto al Papa Francisco como al Rey de España, que le pidan una disculpa a México, por tantos hechos deplorables, a nombre de Dios y de la Corona, pero ambas instituciones se negaron hacerlo, pero no están ayudando a cerrar un capítulo dramático de la vida de México.
El presidente de México no está cobrando ni pidiendo que regresen la riqueza que ilegalmente saquearon, sólo que reconozcan que sus imperios fueron construidos masacrando a miles de indios y esclavizándolos y despojándolos de sus riquezas materiales y su gran riqueza cultural.
Es importante que los mexicanos entren al debate que iniciaron los historiadores Silvio Zavala y Hans-Jürgen Prien con sus crónicas La justificación de Hernán Cortés de su conquista de México y de la conquista española de América.
Y lamentó que ese “gran escritor” que reconozco, Arturo Pérez Reverte haya reacción en las redes sociales en la forma tan obtusa acerca de las disculpas que demanda Andrés Manuel López Obrador, como es el caso de Mario Vargas Llosa, que no me extraña de su pensamiento.
RENOVACIÓN DE LOS HISTORIADORES
Es muy interesante observar que desde el pensamiento político del presidente Andrés Manuel López Obrador, está poniendo un tema en la mesa de la discusión mundial no sólo de México, sino para todos los gobernantes del mundo que deben revisar los hechos vergonzosos de su historia e inyectarles una nueva moralidad a sus actos de gobierno.
Los gobiernos que han tenido México, la mayoría han sido comparsa de los grandes imperios en sus actos de barbarie cometidos.
La propuesta de López Obrador me parece acertada, pero también oportuna porque proviene de un gobernante que tiene la calidad moral para decirlo, en estos momentos que buscan sacrificar a Venezuela en sus justos derechos.
Esos imperios que arrasaron en México, que se robaron sus riquezas, ahora piden y respaldan a Estados Unidos para que despojen a Venezuela de su petróleo.
Lo expresado por López Obrador debe acudir a los historiadores, debe renovar la enseñanza de la historia como una materia viva y no como documentos muertos y aislados.
La historia que vincula, que une los hechos históricos con nuestro actuar presente, esa historia que recobraría su vida, su esencia y que sería una auténtica maestra de la vida.
BRECHANDO
…La remodelación del mercadito “Juan Izabal”, que acordaron hacer el gobernador Quirino Ordaz Coppel y el titular de Culiacán, Jesús Estrada Ferreiro, deben pensar en un mercado que tenga los atractivos para que los culiacanenses vuelvan acudir a consumir sus platillos tradicionales, adquirir sus alimentos frescos, sobre todo, que no de verguiza acudir a comer a dicho lugar.
…Es bueno que sea en Mazatlán, la conferencia minera Discovery 2019, con el fin de que haga una revisión profunda de sus acciones contaminantes que están provocando en todo el país, de las ganancias que se llevan, al igual que los tiempos de los españoles, se llevan la riqueza y nos dejan los problemas. El gobernador Quirino Ordaz Coppel, debe ponerle especial atención. Es un tema con alerta amarilla.
…El gobernador afirmó que han invertido 150 millones de pesos en rescatar los mercados, que bueno, deben ser lugares atractivos hasta para los turistas, si no cumplen esa característica están fallando las autoridades estatales y municipales.
…Ojalá y el gobernador Quirino Ordaz Coppel, vea como está la carretera Culiacán-Mazatlán, una súper-carretera que les debería dar vergüenza cobrar.