Los Generales involucrados en escándalos que se dejan correr en el olvido y la impunidad
Por cumplir ocho meses de impunidad: asesinatos, liberaciones y fugas protegidas por generales.
Los generales secretarios de la Secretaría de la Defensa Nacional no tienen desperdicio en su actuar y a su paso dejan estelas de impunidad y corrupción protegidos por el manto de la impunidad y, como si el uniforme los volviera impolutos, ya que no hay civil con los pantalones que los llame a cuentas, salvo excepciones que parecieran, más castigos por traición de grupo que por enfrentar la ley, se van gloriosos y campantes.
Me referiré a dos hechos sin que por ello pueda olvidar actos vergonzosos cuando Millán/Fox, Aguilar/Calderón-García Luna. Mañana se van a cumplir 8 meses del aciago 17 de octubre de 2019 y permanece la impunidad rampante, voraz, asesina.
Es urgente que la secretaría de la que dependen los militares haga un vuelco a ser presidida por civiles en los principales mandos; es triste y vergonzoso como los generales jefes de zona militar, que son las delegaciones de la Dependencia, de igual rango que las de cualquier otra secretaría de estado, se comportan como si fueran los jefes de la entidad federativa aunque, claro, eso depende de que el gobernador en turno haga valer la ley, tenga el carácter y con amabilidad y firmeza les diga que tienen el mismo rango que cualquier otra representación de Secretaría de Estado.
Huelga destacar que, si ven el video de cambio de mando por término del mandato de Enrique Peña e inicio de Andrés Manuel López, en la Secretaría de la Defensa Nacional, el 80% del discurso del general Luis Cresencio Sandoval González son loas y gratitud al general Salvador Cienfuegos Zepeda (mensaje propio del hijo consentido a su orgulloso papá).
No es de extrañar después de aquella entrevista entre el presidente electo Andrés Manuel y Cienfuegos dada a conocer el 18 de agosto de 2018 por los medios de comunicación a los que Andrés Manuel declaró: “Me reuní con el General de División Salvador Cienfuegos; me dio sus puntos de vista sobre los graves problemas de la violencia y las alternativas. Reiteré que el próximo secretario de la Defensa Nacional será un militar en activo del más alto rango, honesto y leal a la patria”.
Lo que se omitió declarar en ese entonces es que se decidía por el alumno consentido de Cienfuegos y seguiría la misma traza que con Peña Nieto
Con estos breves comentarios, recuerdo que cuando senador de la república, debido a la “emboscada” a un pelotón en Culiacán Sinaloa (área urbana), ocurrida el 30 de septiembre de 2016, perdiendo la vida 6 militares y estando, en aquellas fechas, 11 muy heridos (después ya no se supo nada), solicité se llamara a comparecer ante la Comisión Bicameral de Seguridad Nacional al general Salvador Cienfuegos. A pesar de que era y fue evidente el que fuerzas armadas estuvieran coludidas en los hechos, inmediatamente después de mi posicionamiento, se presentó lo más absurdo: El entonces Presidente de la Mesa Directiva del Senado, senador Pablo Escudero (así se apellida, no es escudero de Manlio), emitió un comunicado de apoyo a las fuerzas armadas sin que el texto lo aprobara el Pleno y, violando todo procedimiento, dio carpetazo a mi solicitud de rendición de cuentas y combate a la impunidad. Se sugiere leer el punto de Acuerdo en manuelcardenasfonseca.mx/deben-comparecer-titulares-de-defensa-gobernacion-y-pgr-por-ataque-a-militares-en-sinaloa/ .
Es decir, Salvador no salvó ni a su pelotón pues todo indicó que los sembraron y existiendo todo tipo de dudas y contradicciones (leer periódico Noroeste de fecha 3 de octubre columna El Malecón) el asesinato queda impune, teniendo más fuego un grupito de delincuentes que los cien del general, lo que me trae a la mente el carpetazo que dio el embustero Murillo Karam en uno de sus primeros actos en el encargo de Procurador General de la República, a comienzos del sexenio de Peña Nieto, al no recurrir al procedimiento judicial obligado y decir que los argumentos presentados por la anterior PGR (Calderón) los retiraba dando así libertad a dos generales sujetos a proceso.
Así las cosas, estamos por celebrar, el día de mañana 17 de junio de 2020, ocho meses de otro acto criminal en el que destacan generales (Luis Cresencio Sandoval González e Inocente Fermín Hernández Montealegre) que gozan de todo tipo de impunidad. Ese día volvieron a caer muertos integrantes del ejército mandados por generales de ese nivel y civiles (ya no supimos cuántos en total), se “fugaron” 51 reos de los cuales más de 30 del orden federal, y liberaron a los detenidos con fines de extradición a Estados Unidos de América.
La crónica de Wikipedia señala: “El 17 de octubre de 2019 a las 14:30 hora local, una patrulla integrada por 35 elementos de la Guardia Nacional y el Ejército Mexicano localizaron a Ovidio Guzmán López —alias «El Ratón»; hijo del narcotraficante Joaquín Guzmán Loera y miembro activo del cártel de Sinaloa— en el fraccionamiento Tres Ríos de Culiacán, Sinaloa. Luego de media hora, tomaron el control de la vivienda, en cuyo interior había cuatro personas. Sin embargo, en un inicio el secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Alfonso Durazo Montaño, manejó la versión de que los policías y militares hacían labores de patrullaje cuando fueron atacados por civiles armados de un domicilio, por lo que repelieron el ataque y en el interior encontraron a Guzmán López. Al día siguiente, el secretario de la Defensa Nacional, Luis Cresencio Sandoval, modificó la versión y aseguró que la patrulla fue atacada mientras esperaba la orden de cateo, al momento de cumplir la orden de aprehensión con fines de extradición que tenía Guzmán López. «El personal actuó de manera precipitada, sin medir las consecuencias para poder obtener un resultado positivo…»”. Después declaró que habían actuado con “torpeza”. Sí, cómo no.
Creo que a algunos les urge que pierda Trump para que no retome la burla de que fue objeto el gobierno de Estados Unidos de América. ( @realDonaldTrup @USAmbMex ).
¡Muchas gracias y sean felices!
