¿Cómo explicarlo? ¿Cómo nos ven algunos extranjeros?

Regreso de ver a unos clientes que tengo en el extranjero. Realmente vale la pena comentar lo sucedido en nuestra plática mensual, que en esta ocasión pidieron fuera de viva voz y no por video conferencia.

Puntuales dimos inicio a la plática/reunión de trabajo. Salón de juntas sencillo, sin carencias, con decoración sin ostentaciones y de buen gusto. Incluyéndome, fuimos cinco a la mesa (los tres de la empresa y un nuevo invitado [abogado])

El Presidente de la empresa abrió con los saludos de bienvenida y la presentación del hasta ese momento desconocido cediéndole la palabra.

En ese momento no se habían sucedido dos hechos que como actos posteriores a la reunión confirman lo allí planteado, es decir, aún no se publicaba el “memorándum” que “echa abajo” la reforma educativa que se cocina en el Congreso con una serie de contradicciones entre el Presidente y sus compañeros de partido legisladores, si bien puntos de vista divergentes entre Ejecutivo y legisladores en Estados Unidos es de lo más normal, con la diferencia de que en ese país no es faramalla ni farsa, y tampoco se sucedía lo de los productores de amapola ( o allá no había trascendido) que secuestraban a militares.

En el uso de la palabra el hasta ese momento recién presentado, se vuelve a reconocer ratificando que es abogado y que, por tanto, sus preguntas versarán en su ámbito de competencia y los riesgos que advierte para los dueños de la empresa en tanto sus flujos comerciales y proyectadas inversiones en el país, por lo que trataré de parafrasearlo, advertidos caros lectores, que en el sobremesa de la reunión les pedí autorización para comentar brevemente el desarrollo de la reunión en mi siguiente colaboración periodística, evidentemente con las reservas del caso, y que es ésta que hoy Usted amablemente lee.

Abogado (A): ¿Cómo entender que se tenga a dos abogados cercanos al Presidente y éste caiga en tantas contradicciones legales [Consejero Jurídico y Secretaria de Gobernación]?

Respuesta (un servidor [US]): No hay diferencia entre México y Estados Unidos, aquí es de todos los días.

A: Pero aquí se combate judicialmente todos los días aquello que es contrario a la ley y a la Constitución y se le da revés a los excesos del señor Trump (por alguna razón no se refiere a Trump como Presidente pero no quise aclarar ese detalle).

US: En México debieran combatir legalmente quienes tienen el derecho legítimo de hacerlo si bien no tenemos la facultad de veto y las excepciones que le brindan las leyes al Presidente de Estados Unidos.

A: ¿Pareciera ser que el actuar de los empresarios mexicanos y la población es como cuando a uno se le debe tanto que se vuelve rehén del deudor?

US: Así pareciera.

A: ¿Usted cree (solicitando mi opinión) que los grandes inversores (éstos son medianos) le temen a que es más lo que pudieran perder pues es demasiada inversión en riesgo e inclusive viven de la compra de papel Mexicano (deuda soberana) por los rendimientos que dan tasa positiva descontando la inflación y riesgo cambiario y es por ello que el FMI (Fondo Monetario Internacional) y el Banco Mundial y los bancos privados un día felicitan y otro cuestionan diplomáticamente?

US: Coincido.

A: En Estados Unidos el señor Trump presiona a la reserva federal, cambia a muchos colaboradores pero cuida los fundamentales que importan a los “americanos”, como es el caso del daño por las drogas y las caravanas de migrantes ¡Aquí se considere eso temas de seguridad nacional! ¿Por qué tan “dóciles” con estos delincuentes?

US: En México el tema de seguridad nacional con el de seguridad interior es un debate que aún no termina. Se tumbó una mal llamada Ley de Seguridad Interior y estamos en la pugna por no militarizar al país en el tema de seguridad interior y, ambos temas, también son concebidos como fundamentales para la gobernanza y paz interior y preocupa lo que sucede con tantas renuncias en los órganos reguladores que gozan de autonomía constitucional y las nuevas designaciones aprobadas por el Congreso, mayoría legislativa manda al igual que en Estados Unidos, así en materia de telecomunicaciones, energía o los consejeros independientes de PEMEX.

Hubo otras preguntas un poco más delicadas y se pasó al tema de cómo el peso se mantiene y el por qué la colocación de nueva deuda y qué representa ello para la presión a las finanzas públicas; la discusión que se da entre el Presidente y las corredurías, calificadoras y bancos respecto del crecimiento de la economía, el castigo a los políticos y empresarios corruptos destacando que, fue la opinión de ellos, entregar el país a los militares es de tal riesgo que no vemos latino américa y su historia (mencionaron Chile, Argentina, Venezuela, Honduras, Panamá, Nicaragua) y el grave caso de Ecuador y la entrega de Assange si bien el Reino Unido declaró que no sería extraditado a un país con pena de muerte.

Mi impresión es que los proyectos de inversión que se tenían para México esperarán a ver cómo se comporta el tercer trimestre del presente año (lo que infiero es que aún sienten que es prematuro un juicio concluyente dado el inicio del sexenio) y los derroteros que lleven diversos temas para entonces y, para esas fechas, ellos estarán más involucrados en los temas de la re elección o no del Presidente Trump aunado a que advierten que cumplir promesas de campaña disparatadas como sucedió en Estados Unidos no es exclusivo de ellos y a México, con sus particularidades, le puede resultar muy complicado empezar a aplicar la ley y ven el mundo federal muy parecido a las decisiones de los gobernadores, eso allá es muy diferente, pues en Estados Unidos no se declara por parte del “señor” Trump perdón a los delincuentes.

Claro está que hay preocupación y pareciera ser que al tener en México un periodo de seis años en el mandato constitucional, la actual administración mexicana espera que no se re elija Trump para volver a empezar con un Presidente distinto en Estados Unidos que acompañe los cuatro años de mandato con los últimos cuatro de López Obrador.

Sin embargo, existe en Estados Unidos un fuerte cabildeo privado para que ya se ratifique en su Congreso el llamado en México T-MEC, pues piensan que por esa vía México quedará muy comprometido en el combate a la corrupción y la mejora laboral, lo cual arrinconaría al gobierno mexicano y al suyo, y se verían obligados a, en los hechos, dar resultados más allá de que expresan que en ambos casos como dicen una cosa dicen otra, la diferencia es que allá se aplica la ley y la misma es pronta y expedita como se ha visto en las controversias judiciales a que está sometido el señor Trump.

Son suyas las conclusiones, caro lector.

¡Muchas gracias y sean felices!

cardenasfonseca@hotmail.com

www.manuelcardenasfonseca.mx

@m_cardenasf

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